sábado, 6 de junio de 2009

El callejón de los milagros

El callejón de los milagros, publicada en 1947, es una de las novelas más conocidas e importantes del autor egipcio Naguib Mahfuz.
Cuenta la historia de los habitantes del Callejón de Midaq, lugar donde ocurre la mayor parte de la historia.

Se estructura la novela en 35 capítulos, cada uno de los cuales cuenta la historia de un personaje y a medida que la trama avanza se entremezclan estos y sus historias. De su estructura interna podríamos decir que es circular, comienza en el café de Kirsha y es ahí donde termina.

Resumen de los capítulos.

Capítulo 1: Se nos presenta el callejón, sus tiendas y quienes las regentan, haciendo especial hincapié en el café de Kirsha.
Capítulo 2: Nos habla de Saniya Afifi, propietaria del segundo inmueble del callejón (en cuya primera planta tenía su morada el doctor Bushi y en la segunda, Umm Hamida y su hija Hamida), una viuda que busca un marido joven con la ayuda de Umm Hamida, la casamentera del callejón.
Capítulo 3: Está protagonizado por Hamida.
Capítulo 4: Se presenta a Abbas y a Husain Kirsha.
Capítulo 5: Vuelve a la historia de Hamida y sus ganas de salir del callejón. Relata el primer encuentro con su pretendiente Abbas.
Capítulo 6: Nos habla de Kirsha y sus conquistas amorosas.
Capítulo 7: Aparece el oscuro personaje de Zaita y sus aberrantes quehaceres.
Capítulo 8: Es el capítulo destinado a Salim Alwan y su bazar.
Capítulo 9: Nos muestra a la señora Kirsha disgustada con su marido por sus escarceos amorosos homosexuales.
Capítulo 10: Retoma la historia de Abbas pretendiendo a Hamida durante uno de sus paseos.
Capítulo 11: Cuenta como la señora Kirsha, desesperada, pide consejo a Radwan Husaini sobre qué hacer con su marido. Después narra la conversación que mantienen Husaini y el señor Kirsha.
Capítulo 12: Nos narra la secuencia de la señora Kirsha encolerizada en el café cuando descubre a su marido con el joven y la posterior discusión entre el matrimonio.
Capítulo 13: Se produce la pedida de la mano de Hamida por parte de Abbas y la despedida de éste.
Capítulo 14: En este capítulo Husain Kirsha se va de casa de sus padres, con la discusión correspondiente.
Capítulo 15: Nos narra como es pedida en matrimonio la señora Afifi a través de la casamentera Umm Hamida.
Capítulo 16: Vuelve a hablarnos de Zaita y su intento de seducción fallido hacia la panadera Husniya.
Capítulo 17: El dueño del bazar, Salim Alwan, le pide a Umm Hamida la mano de su hija.
Capítulo 18: Umm Hamida le cuenta la noticia a su hija. Al día siguiente Umm Hamida va a aceptar el compromiso de su hija y se entera del infarto que ha sufrido Alwan.
Capítulo 19: Se cuenta como se prepara un mitin electoral junto al callejón de Midaq. Durante un discurso de un político se produce el primer encuentro visual entre Hamida e Ibrahim Faraj.
Capítulo 20. Ibrahim Faraj comienza a ser un asiduo al café de Kirsha. Se produce el planeado encuentro entre Hamida e Ibrahim.
Capítulo 21: La señora Afifi visita al doctor Bushi para ponerse dentadura de oro debido a su inminente boda.
Capítulo 22: Cuenta el regreso de Alwan al callejón y narra su enfermedad y cómo ésta le ha cambiado la forma de ver la vida y su carácter.
Capítulo 23: Segundo encuentro de Hamida e Ibrahim. Visita a la casa de éste.
Capítulo 24: Trata la última noche de Hamida en el callejón y su fuga con Ibrahim por la mañana.
Capítulo 25: Se produce el regreso de Husain Kirsha a casa de sus padres con su esposa y cuñado.
Capítulo 26: Ibrahim le enseña a Hamida el prostíbulo, sin saber aún ella que lo era.
Capítulo 27: Zaita y el doctor Bushi van al cementerio a robar una dentadura de un muerto y les detiene la policía.
Capítulo 28: Regreso de Abbas de Tell el- Kebir y descubrimiento de la desaparición de Hamida.
Capítulo 29: Salim Alwan y su disputa con el jeque Darwish (y posterior perdón).
Capítulo 30: Cuenta como Husain Kirsha y Abbas van a la taberna de Vita en el barrio judío.
Capítulo 31: Narra la situación de Hamida, su creciente odio a Ibrahim, y cómo abandona el prostíbulo y se va en taxi hacia la plaza de la ópera.
Capítulo 32: Se produce el encuentro entre Abbas y Hamida y la posterior discusión de éstos en la floristería. Hamida le propone a Abbas que se vengue de Ibrahim.
Capítulo 33: Despedida de Radwan Husaini por su peregrinación a La Meca y a Medina.
Capítulo 34: Se produce el episodio que llevará al desenlace de la trama. Abbas encuentra a Hamida con clientes ingleses y no puede controlar su ira, produciéndose una pelea que acabará hiriendo a la joven y con la muerte de Abbas.
Capítulo 35: Regreso de Husaini al callejón donde da la noticia de la muerte de Abbas. Continuación de la vida en el callejón.

Personajes.

En cuanto a los personajes, podemos hablar de una novela coral en la que se nos presenta una galería de personajes cuyo nexo de unión es el callejón. Viven en él, regentan un local o ambas cosas. Cada uno de ellos tiene su personal relación con el callejón, algunos lo odian y quieren escapar de él, como Hamida y Husain Kirsha (quienes representan la juventud más rebelde), otros en cambio lo adoran y auguran su feliz futuro formando parte del vecindario del callejón, como Abbas, el Tío Kamil, el jeque Darwish. También los hay que desprecian a sus habitantes; suele el ser el caso de los de poder adquisitivo mayor, como la Señora Afifi, Salim Alwan o Zaita, en cuyo caso los motivos que le impulsan a odiar a los demás nada tienen que ver con su posición económica. Por otro lado, estarían los personajes que se conforman con lo que la vida les depara y viven en paz consigo mismo y con Dios, como Radwan Husaini.

Existen otros personajes que tienen menos peso en la historia, como el matrimonio de panaderos, Yaada y Husniya y otros que protagonizan algunas anécdotas más relevantes en la historia como el doctor Bushi.

Tiempo.

El tiempo de la acción se corresponde con la Segunda Guerra Mundial, hacia 1944- 45, más o menos, ya que se menciona su inminente fin.
En cuanto al tempo, podemos decir que es una novela rápida, la acción sucede en unos meses cualesquiera, prácticamente tomados al azar por el autor. La simultaneidad de las historias ayuda a que la historia sea contada con esa rapidez de la que hablamos. Se suceden hechos al mismo tiempo en cada parte del callejón.
El orden de la historia es el orden de los hechos. El narrador no altera la secuencia de lo que va ocurriendo en el callejón.

Espacio.

En cuanto al espacio, nos encontramos con el más importante de la novela, que es aparte de localización de ésta, personaje principal. Se trata del microcosmos del callejón, su día a día, su miseria y su decadencia.
Frente al callejón, aparecen otros lugares con menos relevancia en la historia que se anteponen como antagonistas a éste. Aquí encontraríamos el lujo del prostíbulo, la plaza de la Reina Farida, la Plaza de la Ópera… También son importantes en las historias de los personajes las calles aledañas al callejón, que sin pertenecer a un estatus social mayor al de Midaq, si que dan la sensación de libertad a los protagonistas que se sienten atrapados en el callejón. Estos lugares serían aquellos por los que pasea Hamida; la calle del Muski, la calle Nueva, la de Sanadiqiya, etc.… Por último, los escenarios donde se vive el vicio y sus gentes tienen más que ver con los habitantes del callejón: el barrio judío, taberna Vita, y el cabaret donde trabaja Hamida y encuentra la muerte Abbas.


Lenguaje y estilo.

El lenguaje es sencillo. El autor vuelve a escribir utilizando una prosa rápida y sin pretensiones. Utiliza frases cortas, describiendo con pinceladas a los personajes y narrando con objetividad y sin emitir juicio alguno, las peripecias de los personajes. Las expresiones son coloquiales y los diálogos escuetos. Utiliza la tercera persona, siendo por tanto un narrador omnisciente.

Valoración de la novela.

El callejón de los milagros es una novela que está tan bien narrada, que no puedes dejar de leer para saber qué va a suceder con cada personaje que va presentándote el autor. Es una novela de fácil lectura, con una trama no excesivamente complicada e incluso, en algunos momentos, bastante previsible, pero aún con todo sientes constantemente el deseo de saber más acerca de cada uno de ellos.

Con pocos detalles de cada personaje, se van construyendo en tu interior el mundo que les rodea, sus sentimientos y pretensiones y llegas a comprender a cada uno de ellos casi, como si les conocieras de toda la vida.

Es conmovedor ese final, en el que a pesar de las tragedias que ocurren a algunos de los habitantes del callejón, como a Abbas, a Hamida o a Zaita y el doctor Bushi, los habitantes, siguen sus vidas y el callejón, impasible, recobra la normalidad casi sin haberla perdido en ningún momento.

Vuelve a sorprenderme el autor. Sinceramente, es muy buena novela.